Curiosidades de El Escorial y sorpresas aguardan en el Monasterio. Uno de los datos más curiosos es su planta en forma de parrilla, un homenaje a San Lorenzo por la victoria de las tropas españolas sobre las francesas en la Batalla de San Quintín, que ocurrió en el Día de San Lorenzo.

Además, el Monasterio desempeñó un papel crucial como símbolo de la Monarquía y la religión Católica en una época donde ambos poderes se enfrentaban a la presión de una nobleza europea deseosa de independencia y al aliento de la Reforma protestante. Todo esto moldeó la personalidad de Felipe II, quien fue el artífice de la construcción del Monasterio.

Adentrarse en el Monasterio de El Escorial revela tesoros artísticos y culturales. En su interior, se albergan valiosas obras de arte, como los cuadros de la Pinacoteca, la colección de tapices, los grupos escultóricos y el majestuoso altar mayor de la Iglesia. Justo debajo de este altar descansa el Panteón Real, lugar de descanso eterno de los Reyes enterrados en El Escorial.

Una de las joyas más desconocidas del Monasterio es su biblioteca. En un momento en que la censura inquisitorial era feroz, esta biblioteca se mantuvo libre de restricciones y se considera una de las primeras bibliotecas «nacionales» modernas de España, e incluso de Europa.

La construcción del Monasterio fue una proeza que tomó 20 años en completarse. Durante este tiempo, los obreros disfrutaron de condiciones laborales excepcionales, lo que es una curiosidad poco conocida sobre el lugar.


Curiosidades de El Escorial

Si estás planeando visitar el Monasterio de El Escorial, te encantarán las curiosidades que hemos resumido para ti. Estos datos intrigantes a menudo se entrelazan con algunas de las leyendas más o menos conocidas sobre el lugar.

¿Quién fue el cerebro detrás del Monasterio de El Escorial?

Nada menos que Felipe II, el rey de España, quien dio la orden de construirlo. Los arquitectos encargados de llevar a cabo esta magnífica obra fueron Juan Bautista de Toledo y, tras su fallecimiento, Juan de Herrera. Se dice que Felipe II se involucró tanto en el proceso que personalmente supervisaba las obras desde un mirador cercano, conocido hoy como «Silla de Felipe II».

Esta «silla» es una roca tallada con esa forma peculiar, que se ha convertido en uno de los sitios más emblemáticos de El Escorial. Según la tradición, el rey observaba con detenimiento la evolución de la construcción.

El Monasterio de El Escorial esconde muchas historias fascinantes, y estas son solo algunas de las maravillas que descubrirás en tu visita.


Por qué se construyó el Monasterio de El Escorial

Una de las mayores intrigas del Monasterio de El Escorial es la razón por la que Felipe II de España lo construyó. Este ambicioso proyecto tenía tres objetivos muy concretos que el rey quería cumplir.

  • En primer lugar, Felipe II deseaba honrar el deseo de su padre, Carlos I, de no ser sepultado en la Catedral de Granada, donde yacían los Reyes Católicos. Aunque Carlos I quería descansar en Yuste junto a su esposa, dejó en manos de su hijo la decisión final. Así que, al edificar El Escorial, Felipe II cumplía el deseo de su padre y al mismo tiempo, creaba un símbolo imponente del poder de la Monarquía española, tanto para el interior como para el exterior. Es por esto que el Panteón Real de El Escorial es una parte fundamental del proyecto.
  • Además, el rey quería rendir homenaje a las tropas españolas que habían logrado una gran victoria sobre las francesas en la Batalla de San Quintín, la cual tuvo lugar en el día de San Lorenzo. Esta victoria es la que explica la peculiar forma de parrilla del Monasterio de El Escorial, como te contaré más adelante.
  • Otra curiosidad interesante del Monasterio es que Felipe II quiso enviar un mensaje a los protestantes europeos: demostrar que la Iglesia católica era más fuerte y triunfaría sobre ellos. Esto se refleja en el imponente tamaño y solemnidad del Monasterio, así como en el hecho de que los reyes españoles fueron enterrados allí.

Influencias Italianas en la Construcción del Monasterio de El Escorial

Es fascinante descubrir cómo el arte italiano dejó una huella significativa en la construcción de El Escorial. Los dos arquitectos encargados de edificar este majestuoso Monasterio, Juan Bautista de Toledo y Juan de Herrera, pasaron un tiempo de formación en Italia, lo que influyó notablemente en su obra.

Se dice que el diseño realizado por Bramante para la iglesia de San Pedro del Vaticano dejó su huella en la concepción de la iglesia del Monasterio de El Escorial. Sin embargo, debido a las directrices de la Contrarreforma católica, que exigían que las plantas de las iglesias fueran de cruz latina en lugar de griega, los arquitectos tuvieron que hacer algunas modificaciones al plan original.

El Monasterio de El Escorial es, por tanto, una interesante fusión de estilos y un ejemplo del impacto del arte italiano en su construcción. Esta es una de las muchas curiosidades que nos revelan los secretos de este magnífico lugar.


Cuánto tiempo tardaron en construir El Escorial

La construcción del Monasterio de El Escorial fue una hazaña monumental que demandó una dedicación incansable durante dos décadas, desde 1563 hasta 1584. Aunque en la actualidad podría parecer un plazo prolongado, es esencial comprender la magnitud de esta obra maestra, que no solo incluyó la edificación del monasterio propiamente dicho, sino también un majestuoso palacio, el prestigioso Panteón Real, la renombrada Biblioteca Real y otras importantes dependencias, como las Casas de Oficios, en la actualidad utilizadas como dependencias municipales.

Los números y dimensiones que engloba El Escorial son impresionantes. Con una extensión que abarca nada menos que 35,000 metros cuadrados, este complejo monumental es una muestra palpable del poder y esplendor de la Monarquía española durante el reinado de Felipe II. Cada rincón de esta grandiosa edificación refleja el ingenio y la magnificencia arquitectónica de los maestros que dieron vida a este proyecto sin precedentes.

El Monasterio de El Escorial, un verdadero legado histórico y cultural, sigue maravillando a quienes lo visitan, transportándonos en el tiempo a una época de esplendor y grandeza. Sus claustros silenciosos, sus patios imponentes, sus fuentes y torres majestuosas, y sus 2,000 ventanas que permiten que la luz inunde cada recinto, son testigos de la visión y ambición de Felipe II para crear un lugar que trascendiera en la historia.


Cómo era trabajar en el Monasterio de El Escorial

Muy pocas veces se menciona una de las curiosidades más intrigantes del Monasterio de El Escorial: las condiciones laborales de sus obreros. En el libro «Monasterios de España» de Salvat, se describen algunas prácticas que resultaban novedosas para la época. Los trabajadores gozaban de beneficios únicos, como la exención de impuestos y acceso a un servicio médico poco común en aquellos tiempos. Además, tenían la oportunidad de adquirir alimentos a precios más asequibles que los del mercado.

Una particularidad interesante era que no podían ser despedidos por faltas no profesionales sin la autorización previa de un prior. También, durante los paros técnicos, recibían la mitad de su salario y podían buscar empleo en otro lugar, siempre y cuando prometieran regresar una vez que se reanudaran las obras.

Se ha llegado a relacionar el trabajo en las obras de El Escorial con la enigmática «Sala de los Secretos», una pequeña estancia cercana a la entrada del convento antiguo, diseñada con una acústica muy especial. Según una leyenda del Monasterio, el arquitecto Herrera llevó al rey Felipe II hasta ese lugar durante una huelga de canteros para persuadirlo de pagar los sueldos atrasados, evitando así posibles penurias en el purgatorio.

Estas historias nos ofrecen una perspectiva fascinante del trabajo en la construcción de El Escorial y de cómo se gestionaban las relaciones laborales en esa época.

Monasterio de El Escorial, Patrimonio de la Humanidad

La declaración del Monasterio de El Escorial como Lugar Patrimonio de la Humanidad en 1984 fue un reconocimiento mundial a la importancia histórica, cultural y arquitectónica de esta extraordinaria construcción. Este prestigioso título otorgado por la UNESCO consolidó aún más la relevancia de este majestuoso edificio como un tesoro invaluable para la humanidad.

El Monasterio de El Escorial, además de ser un símbolo de la grandeza y el poder de la Monarquía española durante el reinado de Felipe II, es una obra maestra de la arquitectura renacentista y un exponente destacado del estilo herreriano, creado por el arquitecto Juan de Herrera. La combinación de sus líneas sobrias y su grandiosidad ha cautivado a generaciones de visitantes y ha sido fuente de inspiración para arquitectos y artistas a lo largo de los siglos.

La declaración como Patrimonio de la Humanidad no solo reconoce el valor histórico y artístico del Monasterio, sino también su papel en la preservación de la memoria y la identidad de España. Como testigo de importantes eventos históricos y como lugar de sepultura de reyes y reinas, el Monasterio de El Escorial se ha convertido en un símbolo de la nación y su legado.

La ceremonia de conmemoración del cuarto centenario en 1984 fue un evento especial que resaltó la trascendencia de esta obra icónica y su influencia en la historia y cultura española. Las celebraciones honraron la visión y el legado de Felipe II, quien concibió este impresionante complejo como una expresión de su poder, su devoción religiosa y su pasión por el conocimiento y las artes.

Hoy en día, El Escorial sigue siendo un destino turístico muy apreciado, recibiendo a miles de visitantes de todo el mundo que vienen a maravillarse con la majestuosidad de este lugar histórico. La declaración como Patrimonio de la Humanidad asegura su preservación y protección para las generaciones futuras, para que puedan apreciar y aprender de su significado histórico y cultural.

Sin duda, el Monasterio de El Escorial continuará fascinando e inspirando a las personas en el futuro, perpetuando su legado como un hito invaluable de la humanidad.


Por qué Felipe II eligió El Escorial para construir su Monasterio

No existe una única razón que explique por qué Felipe II escogió El Escorial para construir su Monasterio. La decisión llevó varios años de investigaciones y valoraciones, aproximadamente se dice que tres años. Al final, el rey optó por El Escorial porque la zona ofrecía abundancia de agua, piedra y madera, además de estar relativamente cerca de la Villa de Madrid, donde la Corte solía detenerse con frecuencia. También se tuvieron en cuenta las favorables condiciones climáticas.

Algunas teorías sugieren la presencia de fuerzas telúricas en los pies del Monte Abantos, aunque esto forma parte de las curiosidades más esotéricas asociadas al Monasterio de El Escorial. Sin lugar a dudas, el Monasterio de El Escorial es un edificio que ha dejado una huella legendaria en la historia.

Medidas del Monasterio de El Escorial

Si consideramos lo impresionantes que son las dimensiones del Monasterio de El Escorial incluso en la actualidad, pensemos en el impacto que causaría entre los españoles del siglo XVI, quienes nunca habían visto algo semejante.

Las medidas del Monasterio de El Escorial incluyen cifras asombrosas:

2,000 habitaciones (entre la parte superior e inferior)

15 claustros

16 patios

88 fuentes

9 torres

Una de las curiosidades más destacadas del Monasterio de El Escorial es su cantidad de ventanas, que se estima alrededor de 2,000. Al visitar el lugar, seguro te sorprenderá la majestuosa Basílica. Su cúpula merece un lugar privilegiado en la lista de las medidas del Monasterio, pues alcanza los 92 metros de altura y 17 metros de diámetro. Se dice que su diseño se inspiró en la cúpula del Vaticano.

Una leyenda sobre El Escorial narra que Felipe II ordenó colocar un ladrillo de oro en la cúpula para demostrar al embajador francés la riqueza y solvencia de su reino. Según la historia, el rey también habría colocado dos o tres ladrillos de oro más en distintas partes del Monasterio, para impresionar al diplomático. Sin embargo, en realidad, lo que se encuentra en la cúpula de El Escorial es un relicario que, se dice, contiene los restos de Santa Bárbara, cubierto por una lámina de bronce dorado.


Monasterio con forma de parrilla

Una de las curiosidades más conocidas del Monasterio de El Escorial es su peculiar forma de parrilla invertida. Esta característica se suele relacionar con el martirio de San Lorenzo, pero la elección de Felipe II no se limitó a este aspecto.

Al darle al Monasterio de El Escorial la forma de una parrilla, el rey quería conmemorar también la victoria de sus tropas sobre las fuerzas francesas en la Batalla de San Quintín, que tuvo lugar en el Día de San Lorenzo en 1557. La forma de parrilla, en este sentido, simboliza el sacrificio y el triunfo militar. Es un detalle fascinante que conecta la historia del monasterio con importantes eventos históricos y religiosos.

La Biblioteca de El Escorial, a salvo de la Inquisición

Creo que es importante destacar que, aunque la Sala de las Batallas o la Sala de los Secretos suele ser citada como una de las curiosidades del Monasterio de El Escorial, personalmente encuentro que su biblioteca es mucho más fascinante, por varias razones. Primero, rompe con el estereotipo de Felipe II como un rey gris y conservador, mostrándonos su faceta como un hombre inquieto y apasionado por el conocimiento, coleccionando libros, manuscritos y obras de arte.

La biblioteca de El Escorial puede considerarse la primera biblioteca «nacional» de España debido a su amplia colección y su enfoque moderno en la organización de los libros. A pesar de la reputación de Felipe II como un gobernante conservador y ortodoxo, su pasión por el aprendizaje impulsó la creación de esta valiosa biblioteca.

Entre las muchas curiosidades que alberga la biblioteca del Monasterio de El Escorial, destaca el hecho de que su colección incluyó títulos que la Inquisición había prohibido oficialmente en España. Esto muestra el compromiso de Felipe II por reunir conocimiento diverso e ir más allá de las restricciones impuestas por la iglesia.

Además, la biblioteca fue pionera al implementar una metodología moderna de organización, lo que la convierte en un testimonio del avance en el campo bibliotecario.

Se considera que la biblioteca del Monasterio de El Escorial es una de las curiosidades más valiosas y reveladoras del lugar, ya que nos permite conocer una faceta menos conocida de Felipe II y su apertura hacia el conocimiento y el arte.


Reyes enterrados en El Escorial

Una de las curiosidades más buscadas del Monasterio de El Escorial está relacionada con los reyes que fueron sepultados en el lugar, especialmente en el panteón octogonal ubicado debajo del altar mayor de la iglesia. Antes de llegar a este panteón, los reyes y reinas pasaban varias décadas (entre 30 y 40 años según algunas fuentes) en el Pudridero, otro de los secretos que despierta mucha curiosidad en el monasterio.

Los sepulcros de los reyes enterrados en El Escorial siguen un orden específico: los reyes están ubicados a la izquierda, mientras que las reinas que fueron madres de príncipes herederos se encuentran a la derecha. Existe una excepción, Isabel de Borbón, primera esposa de Felipe IV, que fue sepultada en el Monasterio de El Escorial por expreso deseo de su esposo, aunque no fue madre de un heredero.

Las curiosidades del Monasterio de El Escorial relacionadas con la monarquía también se extienden a los infantes, quienes cuentan con su propio panteón, finalizado a fines del siglo XIX. En este lugar, también descansan las reinas que no tuvieron hijos herederos.

El conjunto de sepulturas y mausoleos del Monasterio de El Escorial es una muestra impresionante de la historia de la monarquía española y atrae la atención de muchos visitantes que buscan descubrir más sobre la fascinante relación entre el monasterio y la realeza.

Quién vive en El Escorial

Cuando se llevó a cabo la construcción del Monasterio de El Escorial, sus ocupantes principales fueron los monjes de la Orden de San Jerónimo, también conocidos como los Jerónimos.

Aunque también se destinaron dependencias para los miembros de la Familia Real, su presencia en el monasterio no era continua. El impulsor de la construcción, Felipe II, tenía unas dependencias extremadamente sencillas, mostrando una humildad que es una de las muchas curiosidades del Monasterio de El Escorial.

Las Habitaciones de Felipe II consistían en tres estancias, siendo el dormitorio una pequeña celda de aproximadamente 9 metros cuadrados con acceso directo al Altar Mayor de la iglesia. Fue en esta modesta celda donde Felipe II falleció el 13 de septiembre de 1598.

Desde 1885, los ocupantes actuales del Monasterio de El Escorial son los monjes Agustinos, responsables de mantener el colegio que ocupa parte de las dependencias del monasterio en la actualidad. A lo largo de su historia, el Monasterio de El Escorial ha albergado diversas comunidades y ha sido testigo de eventos significativos de la monarquía y la religión en España.


El Monasterio de El Escorial, una maravilla en sí misma

En conclusión, el Monasterio de El Escorial es una verdadera joya histórica y arquitectónica que alberga innumerables curiosidades fascinantes. Desde su imponente diseño con forma de parrilla invertida, que conmemora tanto el martirio de San Lorenzo como la victoria militar de las tropas españolas, hasta su impresionante colección de libros en la biblioteca, que desafía el estereotipo de Felipe II como un rey conservador y muestra su pasión por el conocimiento y el arte.

La construcción de este majestuoso edificio, que incluye un monasterio, un palacio, el Panteón Real y otros espacios notables, tomó veinte años y dejó un legado duradero en la historia de España. Su tamaño, con más de 2.000 habitaciones, 15 claustros, 16 patios y 88 fuentes, sin duda impresionó a los españoles del siglo XVI y sigue maravillando a los visitantes en la actualidad.

Las curiosidades en torno a los reyes y reinas enterrados en El Escorial, con su particular ordenación en el panteón, añaden un toque adicional de misterio y solemnidad a este lugar icónico. Asimismo, la presencia de los monjes jerónimos y la posterior llegada de los monjes agustinos, quienes aún residen allí, han dado vida a la rica historia y espiritualidad de este monasterio.

En definitiva, el Monasterio de El Escorial es una ventana al pasado que nos permite comprender mejor la mentalidad y la grandeza de una época marcada por la influencia italiana y las ansias de poder y religiosidad.

Es un testimonio perdurable de la visión y el legado de Felipe II, quien dejó su huella en la historia de España a través de esta imponente obra arquitectónica y cultural. Visitar El Escorial es adentrarse en un mundo lleno de curiosidades, leyendas y significado, que nos invita a reflexionar sobre la grandeza y la complejidad del pasado español.